La tarde del jueves se celebró por cuarto año consecutivo, la fiesta de Janucá en las calles de Madrid, concretamente en la Plaza de la Villa. En años anteriores se celebró en la Plaza de Olavide, en la Plaza de Oriente y el año pasado y este en la Plaza de la Villa, parece que éste será el lugar definitivo para su celebración, no sólo por ser el escenario más antiguo y emblemático de Madrid, también por la cercanía del Palacio de Cañete, actual sede de Casa Sefarad Israel.

El acto ha contado con la presencia de los embajadores de Israel y Estados Unidos, el presidente de la Comunidad Judía de Madrid y otras personalidades.
En ocasiones anteriores, la celebración ha contado con la presencia del alcalde pero, este año, debido a su renuncia a la alcaldía para incorporarse al recién creado equipo de gobierno nacional, no hemos contado con él. Sí se esperaba que apareciese la que será en breve la nueva alcaldesa de Madrid, Dña. Ana Botella pero, pese a la expectación creada, Botella no hizo acto de presencia, ¿dónde estaría?

El acto comenzó con los discursos de varias personalidades y, antes del encendido de la tercera vela, la guapísima cantante Israelí, Mor Karbasi nos hizo disfrutar con canciones tradicionales sefarditas.

Después de la música, una niña, acompañada por el rabino, fue la encargada de encender la januquía, acto seguido, las oraciones y la bendición del rabino pusieron fin al acto religioso.

La música tradicional, el té y los puestos donde repartían sufganiot, unos buñuelos que este año no eran precisamente los mejores que han hecho, ayudaron a entonar a la gente que bailaba y se divertía con la música de la orquesta.


¡Janucá sameaj!