Los balcones madrileños siguen dando sorpresas, algunas un poco raras como este balcón al que he llamado "El Balcón Inquietante". No hace falta hacer una descripción detallada del mismo para saber porqué digo que es inquietante, sólo hay que ver el personaje que aparece a la izquierda... Otro elemento inquietante es el perro-gato-tejón-alimaña que hay en el lado opuesto.

Este balcón, como muchos otros que han aparecido en esta sección, tiene el aliciente de que va  cambiando periódicamente, hace unos meses, el ser que se asoma vestía de forma diferente y, si no recuerdo mal, portaba un quitasol.