El año pasado, si no recuerdo mal, me encontraba sentado, esperando a un amigo en una plaza de un pueblo llamado: Villa del Prado, al sur de Madrid, cuando algo me sobresaltó, se trataba de un burro que tiraba de un carro publicitario. En un principio me asusté, luego mi amigo y yo nos reimos de la escena e hice unos comentarios a mi amigo que no reproduzco. Saqué unas fotos al burro y me empezó a dar lástima, me preguntaba si no acabaría sordo el pobre animal todo el día de un lado a otro del pueblo con esos anuncios estridentes.
Hoy he encontrado esta entrevista que hacen al dueño del burro en Telemadrid, parece ser que se trata de un publi-burro, sobran comentarios... mejor dicho, ¡me muerdo la lengua!