Faltan pocas horas para que comience el año 2012, un año que no pinta muy bien en lo que se refiere a economía y ya no digamos si nos creemos las mamarrachadas apocalípticas que vaticinan algunos. De lo que sí que estoy seguro es de que será un año mejor que el 2011.

Os deseo a todos un muy feliz año nuevo lleno de prosperidad y felicidad. Nos vemos el año que viene.

Faltan pocos días para la llegada del 2012, año en el que los más agoreros hablan del fin del mundo. De todos los desastres apocalípticos que profetizan, hay uno que sí podría ocurrir y de ello han alertado organismos tan solventes como la Agencia Europea de Defensa (EDA) y la Agencia Espacial Europea (ESA), se trata de la altísima probabilidad de que nuestra vida se vea seriamente alterada por los efectos de una gran tormenta solar.

En el caso de que una gigantesca tormenta solar se produjese, además de quedarnos sin electricidad y sin la tecnología de la que dependemos, devolviéndonos a la Edad Media, seríamos testigos de un precioso espectáculo, las auroras boleares.

En nuestra latitud es casi imposible observar este fenómeno pero, no sería la primera vez ni la última que se produzca. Una de las auroras boreales más espectaculares de las que se tiene noticia en Madrid fue la ocurrida a primeros de septiembre de 1859.

Aquella tormenta solar que la produjo fue la más potente registrada hasta ahora, prácticamente no alteró la vida de la gente, sólo algunas zonas de Europa sufrieron daños en la incipiente tecnología del telégrafo, de hecho, los periódicos de la época sólo hacen pequeñas referencias al espectáculo producido por las auroras boreales, como el diario "La España" o el diario liberal “El Clamor Público” que se hacía eco de la noticia de este modo:

"La aurora boreal que se observó en Madrid, ó por mejor decir en España, en la noche del domingo al lunes de la semana pasada, ha sido ostensible en toda Europa, á juzgar por las noticias que van llegando de París, y otras varias. El Diario de Bruselas ha hecho observar que el mismo día se 2 hicieron visibles varios fenómenos curiosos de la física del globo. Al medio día del domingo, la aguja magnética empezó á sufrir impresiones violentas y las líneas telegráficas en Ostende, Amberes, Londres, París y Berlín, y aun el cable submarino entre Ostende y Donores dejaron percibir signos evidentes de relación con el precipitado fenómeno durante el espacio de su aparición".

(Publicado el 6 de septiembre de 1859, texto íntegro con errores incluidos)

Este suceso fue el mayor registrado pero, a lo largo del siglo XX, en un par de ocasiones se han podido ver auroras boreales en Madrid y en otras zonas de España, concretamente en la década de los treinta y los cincuenta.

¿Qué pasaría en Madrid si ocurriese la gran tormenta solar? pues en el peor de los casos, además de quedarnos sin luz, sin agua, sin teléfono, sin comunicaciones ni información, el caos sería absoluto. Resulta espantoso el imaginar una ciudad sumida en el caos y en la lucha encarnizada de millones de personas saqueando supermercados en una gran ciudad como Madrid. Cierto es que una situación así es mucho imaginar pero es una de las posibilidades, por eso, es interesante estar informado y saber qué hacer en caso de que una gran tormenta solar se produjese, estos son algunos enlaces interesantes.

Tormenta solar de 1859

Europa advierte del riesgo "creciente" de una tormenta solar catastrófica

Informe de la Comisión Europea

España, ajena a las consecuencias fatales de una tormenta solar

Qué hacer si se produjese una gran tormenta solar catastrófica


Foto: NASA



De todos los balcones que han ido apareciendo en esta sección, el que aparece en la foto es uno de los más curiosos, no porque en él podamos ver un objeto extraño, lo es porque podríamos denominarlo como "el balcón multidisciplinar".

Como se puede ver en la foto, el balcón es pequeño, tanto que no tiene sitio para poner una silla donde tomar el fresco en verano, así que para suplir la falta de espacio, en la propia barandilla, hay un par de asientos incorporados, eso sí, de una forma un poco temeraria. Desconozco si a día de hoy alguien se ha precipitado por el balcón al sentarse en uno de esos asientos.

Peligroso puede que sea pero nadie podrá negar que es bastante práctico.



Es Madrid no Madriz os desea a todos unas felices fiestas y una feliz Navidad.

La tarde del jueves se celebró por cuarto año consecutivo, la fiesta de Janucá en las calles de Madrid, concretamente en la Plaza de la Villa. En años anteriores se celebró en la Plaza de Olavide, en la Plaza de Oriente y el año pasado y este en la Plaza de la Villa, parece que éste será el lugar definitivo para su celebración, no sólo por ser el escenario más antiguo y emblemático de Madrid, también por la cercanía del Palacio de Cañete, actual sede de Casa Sefarad Israel.

El acto ha contado con la presencia de los embajadores de Israel y Estados Unidos, el presidente de la Comunidad Judía de Madrid y otras personalidades.
En ocasiones anteriores, la celebración ha contado con la presencia del alcalde pero, este año, debido a su renuncia a la alcaldía para incorporarse al recién creado equipo de gobierno nacional, no hemos contado con él. Sí se esperaba que apareciese la que será en breve la nueva alcaldesa de Madrid, Dña. Ana Botella pero, pese a la expectación creada, Botella no hizo acto de presencia, ¿dónde estaría?

El acto comenzó con los discursos de varias personalidades y, antes del encendido de la tercera vela, la guapísima cantante Israelí, Mor Karbasi nos hizo disfrutar con canciones tradicionales sefarditas.

Después de la música, una niña, acompañada por el rabino, fue la encargada de encender la januquía, acto seguido, las oraciones y la bendición del rabino pusieron fin al acto religioso.

La música tradicional, el té y los puestos donde repartían sufganiot, unos buñuelos que este año no eran precisamente los mejores que han hecho, ayudaron a entonar a la gente que bailaba y se divertía con la música de la orquesta.


¡Janucá sameaj!

El 22 de diciembre es el día en el que todos los españoles estaremos pendientes de unos niños vocingleros que pueden hacer saltar a más de uno de alegría al escucharles, se trata del sorteo de la Lotería de Navidad.

Este sorteo es el más importante de los que se celebran al año, no sólo por la cuantía de los premios, también por tratarse de un sorteo tan popular y tradicional que una Navidad sin él no es Navidad pero, no sólo eso, hay infinidad de curiosidades alrededor de este sorteo, estas son algunas.

El origen

La Lotería de Navidad nace hace casi doscientos años, el primer sorteo fue celebrado el 18 de diciembre de 1812, en Cádiz, el mismo año en el que nacía una de las constituciones más avanzadas del mundo que sirvió de modelo a otras naciones, la Constitución Española de 1812, conocida popularmente como “la Pepa” por ser promulgada el día de San José.

El nombre

El primer sorteo de la lotería navideña era conocido como “Lotería Moderna”, no fue hasta el 23 de diciembre de 1897 que empezó a denominarse como “Lotería de Navidad”.

El sorteo

Se celebra cada 22 de diciembre en Madrid, antiguamente en la sala de loterías de Guzmán el Bueno pero, recientemente, se decidió trasladar el sorteo al Palacio de Congresos de Madrid, por ser un lugar más amplio y con un mayor aforo.

Los niños del Colegio de San Ildefonso siempre han sido los encargados de “cantar” los premios y son seleccionados por su buena dicción y su timbre de voz.
Hasta hace unas décadas sólo eran los chicos los que podían participar en el sorteo, ahora son niños y niñas.

Los premios y los números están escritos con láser en unas bolas de madera de boj que se encuentran en dos grandes bombos, uno para premios y otro para números.
Los bombos y las bolas son custodiados y revisados ante notario para evitar “sospechas” el día antes del sorteo. De esos bombos irán saliendo las bolas con los números y premios que los niños de San Ildefonso van cantando.

Curiosidades

El origen del sorteo fue la necesidad de recaudar impuestos sin machacar al contribuyente.

El primer número agraciado con la lotería navideña fue el 03604 y obtuvo la cantidad de 8.000 pesos fuertes.

El sistema de bombos y bolas de madera se empezó a utilizar en 1913.

En 1938, en plena Guerra Civil, hubo dos sorteos de Navidad, uno en Burgos que se encontraba en el bando nacional y otro en Barcelona, en el bando republicano.

En el mes de julio comienzan a venderse por toda España los números de la Lotería de Navidad.

En 1949, un malagueño, días antes del sorteo, dijo haber soñado con el número el 55.666, nadie le hizo caso, el premio “gordo” fue para ese número.

Doña Manolita es la administración de lotería de Madrid que más vende y la qué más premios ofrece.

La provincia de Madrid es donde más veces ha recaído el premio gordo del sorteo de Navidad.

Nunca ha tocado el gordo en las provincias de Ávila, Huelva, Orense, Salamanca y Tarragona.

Las bolas miden 18,8 milímetros de diámetro y pesan tres gramos.

Frikismo lotero

Otra de las tradiciones típicas en este sorteo de lotería, es asistir al Palacio de Congresos disfrazado, cuanto más estrafalario mejor. El motivo no es otro que el de dar la nota, imagino que pasárselo bien y de paso salir en todas las televisiones. Obviamente esta costumbre siempre ha sido considerada ridícula pero, el paso del tiempo y el frikismo imperante en algunos sectores de la sociedad, ha logrado que se convierta en una tradición más, ya se sabe, hay gente para todo.


El próximo jueves será el sorteo y, como dicen los toreros, ¡que Dios reparta suerte! que nos toque algo y si no nos toca, que tengamos salud.


Hace unos días consultando la fototeca del Ministerio de Cultura me encontré con esta foto.

El edificio me llamó mucho la atención, así que me puse a buscar información sobre este lugar. Los datos que aparecían en la base de datos del ministerio eran escasos y erróneos, sólo había una cosa clara, su ubicación, el parque de El Retiro.

Este misterioso edificio, hoy desaparecido, era el Pabellón Real, una hermosa construcción edificada con motivo de la Exposición Nacional de Minería, Artes Metalúrgicas, Cerámica, Cristalería y Aguas Minerales de 1883. Estaba ubicado muy cerca del Palacio de Cristal, junto al lago artificial y se encontraba sobre una rocalla que simulaba una pequeña cascada.

El pabellón, como se puede ver en la foto, era de estilo árabe y tenía una gran cúpula que, en su origen, era dorada, fue pintada por los alumnos de la Escuela de Arquitectura de Madrid.
Hay pocas descripciones sobre el interior de este edificio, he encontrado una de un periódico de la época que cuenta que en el interior, el techo estaba ricamente decorado con idénticas pinturas a las que existían en el antiguo Palacio de los Reyes de León, copiadas unos años antes de su destrucción por el arquitecto Ricardo Velázquez.

De aquella exposición, que tenía como objetivo fomentar y dar a conocer la industria minera española tanto dentro como fuera del país, sólo se conservaron dos edificios, el Palacio de Velázquez y el Pabellón Real que, desgraciadamente, fue derribado en los años cincuenta del siglo XX por encontrarse en estado de ruina.

En este plano de la exposición, aparecido en un diario de 1883, están marcados los dos pabellones que llegaron casi hasta nuestros días, el de Velázquez, hoy sala de exposiciones y el desaparecido Pabellón Real.



Imagen: Fototeca de Patrimonio Nacional

Navidad en Cibeles

Por EMNM | 12/19/2011 |

El domingo pasado el Ayuntamiento de Madrid se vistió de luz y sonido para crear un fantástico espectáculo navideño. Lo podéis ver en este vídeo, uno de los muchos vídeos que hay en Internet.

The Hole

Por EMNM | 12/13/2011 |

El sábado pasado fui invitado al espectáculo “The Hole” una producción de Paco León en colaboración con la Compañía LetsGo e Yllana, que se representa en el Teatro Häagen-Dazs Calderón.
La invitación fue de lo más original porque, además de disfrutar del espectáculo, pude ver el backstage y los preparativos de la representación minutos antes de que diera comienzo, una curiosa experiencia.

The Hole es, posiblemente, uno de los espectáculos más divertidos que podemos ver ahora en la cartelera madrileña, un show en el que se combina un poco de todo, cabaret, burlesque, circo, el teatro y sobre todo, mucho humor.

El maestro de ceremonias es el actor Álex O’dogherty al que nunca había visto en el teatro, sólo en algunas series de televisión y que me ha sorprendido bastante, para bien, no es fácil representar un papel como el suyo en el que canta, baila y anima al personal con un ingenioso y divertido sentido del humor.

El espectáculo alterna los diálogos con números artísticos sorprendentes como el elástico Huit-Huit, un hombre con una flexibilidad extraordinaria o la aparición estelar de la rusa Dilya Abdulaeya, una voluptuosa… muy voluptuosa Marilyn Monroe que ejecuta un espectacular número en el anillo aéreo.

Otros personajes son “el Barman” que recuerda sospechosamente a la mítica Divine o la despampanante Vinila von Bismark que se la puede ver en algún número y por el “patio de butacas” convertido para la ocasión en una sala de fiestas con sus típicas mesitas con pulsadores para llamar a los camareros y tomarte una copa tranquilamente mientras disfrutas del espectáculo.

Seguro que, como me pasó a mí, te preguntarás qué pinta una rata en el logo de la obra, una preciosa rata por cierto, pues es muy sencillo, es parte del show y no sólo eso, es una de las protagonistas y forma parte de una gran historia de amor.

The Hole es un espectáculo muy recomendable, divertido y del que sales del teatro de muy buen rollo, por eso, la recomendación “madroñera” de Es Madrid no Madriz a The Hole es de 7 Madroños.


The Hole (El Agujero)
Teatro
Häagen-Dazs Calderón
+ 18 años

Joyas de la Filmoteca

Por EMNM | 12/10/2011 |

Por fin la Filmoteca Española está subiendo algunas de sus películas a Youtube, algo que se agradece pero que se debería haber hecho antes, pero bueno, nunca es tarde si la dicha es buena.

Entre las películas subidas hay esta rareza en la que muestra un Madrid verbenero de 1930.


Curioso ¿verdad?

Esta semana El País publicaba una noticia bastante interesante que ha pasado prácticamente desapercibida, se trata de un importante hallazgo arqueológico en la localidad madrileña de Cubas de la Sagra.

En el verano de 2010, en un campo de labor donde estaba previsto la construcción de unos chalés, la Dirección General de Patrimonio realizó previamente unas actuaciones prospectivas y, como se sospechaba, aparecieron restos arqueológicos, lo que nadie se imaginaba es que fueran tan importantes.

En una estructura excavada a un metro de profundidad, se han localizado un conjunto de piezas de época tardorromana. Parece ser que se trata de un ajuar compuesto por 14 piezas de terra sigillata, además de cuencos y páteras de bronce, entre otras piezas.
El ajuar estaba enterrado y protegido con paja. Los arqueólogos sospechan que los dueños de este ajuar, lo ocultaron por temor a una invasión, en este caso de los alanos. De ser cierta esta teoría, los dueños no debieron sobrevivir a la invasión, no así su rico ajuar que, 16 siglos después se conserva en perfecto estado.

Parece ser que este es uno de los descubrimientos más importantes de los últimos tiempos en nuestra región, que no es el único, pues también se han localizado 11 hornos cerámicos, unas termas y una necrópolis con restos óseos que actualmente están siendo estudiados por el Gobierno Regional.

Esto es todo lo que se sabe por ahora, esperemos que en breve tengamos más noticias sobre este hallazgo.


Noticia relacionada

Foto: El País

El 6 de diciembre es el Día de la Constitución, una de las fechas importantes del calendario festivo español.
Nuestra constitución es una de las más jóvenes de Europa y no es la primera que hemos tenido en España, hubo varias que, casi todas, han acabado de forma dramática.

Como no podía ser de otra manera, en Madrid tenemos un monumento en honor a la Carta Magna, posiblemente el monumento más feo de todo Madrid pero, hubo un tiempo en el que una de las plazas más emblemáticas de la ciudad fue llamada Plaza de la Constitución, me refiero a la actual Plaza Mayor.

Posiblemente, esta plaza sea el mejor ejemplo para demostrar la enfermiza obsesión que tenemos los españoles en cambiar las cosas una y otra vez.

En sus inicios, nuestra querida plaza se llamaba “Plaza del Arrabal”, años después pasó a llamarse Plaza Mayor y mantuvo este nombre hasta principios del siglo XIX.

Con “La Pepa”, nombre vulgar que le dieron a la Constitución Española de 1812 todas las plazas mayores de España fueron llamadas “Plaza de la Constitución”, así que nuestra Plaza Mayor volvió a cambiar de nombre y la llamaron "Plaza de la Constitución".

Como todos sabemos la Constitución de 1812 se fue al garete pocos años después y en 1814, con el cambio de régimen, las plazas en su honor cambiaron de nombre otra vez y la actual Plaza Mayor pasó a llamarse “Plaza Real”.
El siglo XIX fue de todo menos tranquilo, los cambios de régimen y políticos se reflejaron, ¡como no! en los nombres de la Plaza Mayor, volviéndose a llamar “Plaza de la Constitución” en los períodos de 1820 a 1823, después de 1833 a 1835 y más tarde de 1840 a 1843.

Pasaron los años y... ¿qué pasó? pues que la plaza cambió de nombre. En 1873 pasó a llamarse “Plaza de la República”, meses más tarde “Plaza de la República Federal” y, como era de esperar, el nombre cambió otra vez, en 1874 volvió a llamarse “Plaza de la Constitución”.

Los cambios de nombre de la plaza no cesaron hasta el final de la Guerra Civil, fue entonces cuando se recuperó el nombre de “Plaza Mayor” y así se ha mantenido hasta la actualidad, algo que espero y deseo siga así durante muchos años.

La Constitución es documento que nos garantiza nuestros derechos y libertades, además de marearnos con el cambio de nombres del callejero cada vez que algún iluminado decide acabar con ella.


Desde 1988, cada primero de diciembre, se conmemora el Día Mundial de la Lucha Contra el Sida, una pandemia que ha matado a más de 25 millones de personas en todo el mundo y que todavía representa una amenaza para toda la sociedad.

Este es un día especial que sirve para concienciar a la población sobre su prevención y tratamiento pero, también para solidarizarnos y apoyar a las personas afectadas por esta enfermedad, por ello, en los monumentos más emblemáticos de las ciudades se colocan grandes lazos rojos. En Madrid, el lugar elegido para colocar uno de esos grandes lazos es el arco central de la Puerta de Alcalá, por ser el monumento más emblemático de nuestra ciudad.

Existe en Madrid otro gran lazo rojo que perdura todo el año, está situado en la plaza de Vázquez de Mella y da entrada a uno de los garajes más originales de la ciudad.

Este garaje que es de uso público y privado, se inauguró en el año 2005 y se invirtieron cerca de un millón de euros en su remodelación.
El diseño, bautizado con el nombre de “Chueca An-Dante” es obra de la arquitecto italiana Teresa Sapey. El nombre del proyecto hace referencia a “Chueca”, por encontrarse precisamente en el barrio de Chueca, que es el "barrio gay" más famoso de Europa y, “An-Dante” que es un juego de palabras en el que aparece el nombre de Dante Alighieri, pues en uno de los rótulos luminosos del garaje se puede leer la frase "Amor que ama obliga al que es amado, me ata a tus brazos, con placer tan fuerte, que, como ves, ni a un muerto me abandona" texto que aparece en la obra La Divina Comedia.

Una de las cosas que llama la atención, además de los rótulos con referencias literarias, son las fotografías que allí se exponen, además de los colores y materiales del garaje, colores fuertes, como el rojo y negro.

El equipo de Teresa Sapey, según dijeron en su día, quisieron hacer de este lugar no sólo un aparcamiento, querían que fuese un sitio de referencia para enriquecer la ciudad y que esté lleno de significado, algo que en mi opinión sí está logrado, pues tanto el resultado de la obra como su ubicación está llena de simbolismo.

No quisiera terminar este post sin unirme a la conmemoración mundial para la lucha contra el VIH y mostrar desde aquí todo mi apoyo y solidaridad a todas las personas afectadas, no sólo hoy, quiero que sea una muestra de apoyo permanente, como lo es el lazo rojo de la plaza de Vázquez de Mella.


Enlace relacionado

Foto: Google maps


Seguimos con los balcones madrileños pero, esta vez uno especial y muy popular, podríamos llamarlo el balcón celebrity porque se trata del balcón unas personas muy populares y mucho más desde que fueron protagonistas de un reality de la MTV.

¿Sabes a quién pertenece este balcón?


Todas las ciudades muestran, se quiera o no, la cara más dramática de la sociedad, en los mendigos, personas de todo tipo que, por infinidad de razones, se han visto obligados a vivir en la calle, sin recursos y convertidos en seres invisibles o mejor dicho, en seres que nadie quiere ver.

En Madrid hay decenas de personas que viven en la calle, los vemos todos los días en las puertas de las iglesias, de los mercados, en el metro y en los lugares más transitados de la ciudad. Por desgracia, desde hace pocos años, el número de personas sin techo está aumentando de forma dramática, el motivo de este aumento no es otro que la crisis económica que padecemos y que cada vez se hace más dolorosa.

Las normativas municipales actuales hacen todo lo posible para que desaparezca de nuestras calles la mendicidad, eso sí, dentro de lo que podríamos denominar como de una forma “políticamente correcta”, pero esto no siempre fue así, en el pasado era muy diferente, bueno, no tanto, la idea era la misma, quitar de las calles aquello que nos molesta o no nos gusta ver pero con una gran diferencia, antes se hacía a las bravas. Uno de esos casos lo encontramos en el desaparecido Asilo de Mendicidad de San Bernardino, un lugar que en el siglo XIX fue uno de los mayores centros de internamiento de mendigos de España.

Mendicidad en el pasado

Los mendigos nunca han sido objeto de consideración por el Estado hasta la Edad Moderna, hasta entonces, las acciones del Estado fueron casi siempre de represión. La mayoría de las veces, la Iglesia ha sido casi la única institución que podía ofrecer alguna ayuda a las personas sin recursos.

En el Madrid de principios del siglo XIX las autoridades disponían de pocos recursos para apartar de las calles a toda una legión de mendigos, algunos eran obligados a vivir hacinados en hospicios, otros eran condenados a trabajar en obras públicas o directamente les enviaban al Ejército. En aquella época muchos fueron los proyectos realizados para la creación de centros en los que albergar a toda esta gente desfavorecida, la mayoría de estos proyectos quedaron en nada.

El Asilo de San Bernardino fue uno de los pocos proyectos para el internamiento de mendigos que vieron la luz, su creación se precipitó, entre otras causas, por culpa de una terrible enfermedad, el cólera morbo.

En verano de 1834, de declaró una epidemia de cólera en Madrid. El grupo social más afectado fueron los mendigos, además de ser el medio más peligroso de propagación. Precisamente por esta razón, el 3 de agosto de aquel año y por Real Orden, se puso fin a los obstáculos para la creación de un centro para los mendigos y, un mes más tarde, el 18 de septiembre de 1834, se instalaron los primeros en el Asilo de San Bernardino.

El hoy desaparecido asilo, se encontraba a extramuros de la ciudad, más o menos en lo que hoy es la calle Isaac Peral, en un ruinoso convento fundado en 1572 y posteriormente desamortizado.
En un principio estaba financiado por el gobierno, por las limosnas y sobre todo por las cuestaciones que se hacían en las diputaciones de barrio. Más tarde, también recibirían ingresos por los trabajos realizados por las personas que allí se encontraban internados.

Según Mesonero Romanos en su obra, “Escenas Matritenses”, en el que habla de su visita a este lugar, el asilo parecía un lugar agradable en el que no sólo se le daba sustento, ropa y comida a las personas que allí ingresaban, además les formaban y les daban un trabajo en relación a sus conocimientos.

Llegó a albergar a casi un millar de personas, entre hombres, mujeres y niños. Todos recibían al entrar una especie de uniforme, los hombres una chaqueta y pantalón de paño con botones blancos con el nombre del asilo, tres camisas, un sombrero una gorra, un par de zapatos, dos pañuelos una blusa azul y un cinturón. Las mujeres recibían un jubón y una saya con el escudo del centro, dos sayas bajeras, tres camisas, un apretador, dos pares de medias, dos pañuelos para el cuello, dos pañuelos de cabeza, dos de bolsillo, dos delantales, dos paños y un par de zapatos.

Mesonero Romanos también habla de la alimentación que recibían las personas que vivían allí, este era el menú habitual.

Almuerzo: un cuarterón de pan en sopa condimentado con aceite, sal, ajo y pimiento.

Comida: potaje de menestra y patatas, condimentado con cabezas de carnero o grasas animales o aceite en los días de vigilia y media libra de pan.

Cena: potaje de menestras y patatas y un cuarterón de pan.

Pese a las alabanzas que Mesonero Romanos hace a este lugar y por muy buenas que fueran las intenciones, no dejaba de ser un centro de internamiento en el que se privaba de libertad a las personas que se encontraban en él, contaba con un calabozo en el que las personas rebeldes eran castigadas e incluso eran víctimas de severos castigos físicos por incumplir las normas del centro.

El Asilo de San Bernardino estuvo en funcionamiento hasta 1907, año en el que fue clausurado, más tarde, terminada la Guerra Civil fue demolido.

La mendicidad siempre ha estado y estará presente en Madrid, actualmente hay numerosos centros en los que las personas sin techo reciben las atenciones necesarias que, afortunadamente, nada tienen que ver con los asilos creados en el pasado, hoy son modernos centros de ayuda a las personas desfavorecidas que dependen del Ayuntamiento o bien de asociaciones benéficas como Cáritas.



Fuente: Escenas Matritenses. Mesonero Romanos

Foto: Foro Urbanity

Hace un par de días estuve viendo Zarkana, el último espectáculo del Circo del Sol. Se trata de una ópera rock en la que se combina la música con diversos números circenses al más puro estilo del Circo del Sol.

La puesta en escena es realmente buena, el decorado y la iluminación logran una atmósfera mágica pero el resultado final es un espectáculo bastante flojo.

Problemas

El primer problema que nos encontramos en Zarkana es el propio recinto donde se representa, el Madrid Arena, que es un magnífico lugar, grande y bien equipado pero muy mal gestionado en lo que se refiere a la distribución, tanto del escenario como de los espectadores. El público que tenga asientos en las partes altas del graderío ya pueden tener buena vista o bien ir provistos de unos prismáticos, de lo contrario no lo podrán disfrutar.

Ignoro las razones que han llevado a la organización del Circo del Sol a distribuir de esa manera tan extraña el escenario, según los propios organizadores, tuvieron muchos problemas técnicos por temas de espacio, algo que a mí personalmente me cuesta creer pero si lo dicen ellos será verdad.

Fallos

El Circo del Sol es una compañía con una excelente reputación, todos los que hemos asistido a sus espectáculos hemos podido comprobarlo, espectacularidad, calidad y buen gusto han sido siempre sus señas de identidad, digo han sido, en pasado, porque en Zarkana no he podido ver ese brillo ni esa calidad. Es bien cierto que el montaje tiene estupendos y originales números pero, desgraciadamente, se quedan totalmente deslucidos por innumerables fallos.

El mundo del circo tiene sus riesgos y gran dificultad, son humanos y muchas veces se juegan la vida en el escenario para darnos un buen espectáculo pero, también es cierto que de una compañía como es el Circo del Sol, se le supone un nivel de perfección bastante alto, cosa que no pude ver en Zarkana.
No sé si será por la crisis o que el propio Circo del Sol va camino de su ocaso, lo cierto es que Zarkana, sin dejar de ser un buen espectáculo, no tiene la espectacularidad con la que nos tenía acostumbrados.

La valoración de Es Madrid no Madriz es de 5 madroños.


En una de las plazas más castizas de Madrid, la de Puerta Cerrada, nombre que viene dado porque allí había una de las puertas de la muralla, podemos ver un mural pintado en los años ochenta que decora la fachada de un edificio. En este mural aparecen unos símbolos y un lema muy curioso del que mucha gente desconoce su significado.

El mural está bastante deteriorado pero todavía podemos ver en él una enorme piedra de la que saltan chispas y bajo la piedra agua, además de un lema: “Fui sobre agua edificada, mis muros de fuego son”.

Este simbólico mural hace referencia al nacimiento de Madrid pero para saber qué es cada cosa hay que ir por partes.

El agua

Todos los que vivimos en Madrid sabemos que bajo nuestros pies hay gran cantidad de agua. Existen numerosos acuíferos y, por si eso no fuese suficiente, las canalizaciones de agua para abastecer a la población han estado presentes desde el nacimiento de la ciudad.

La piedra y las chispas

La piedra que aparece en el mural es sílex, un mineral muy común en nuestra región que fue usado por los habitantes de estas tierras desde hace miles de años. En la prehistoria se usaba para fabricar herramientas cortantes y para otros usos. Si golpeamos dos trozos de esta piedra saltan chispas, de esta forma se hacía fuego.
El sílex, al ser una de las rocas más abundantes en Madrid, fue utilizada en la construcción, hay miles de ejemplos por toda la ciudad, desde conventos a edificios particulares. Una de las primeras construcciones en las que se empleó este material fue la muralla árabe que rodeaba el primigenio Madrid.

La leyenda

Existen multitud de versiones sobre los mitos y leyendas de dieron lugar a este emblema, la más popular se refiere a que cuando la ciudad era atacada, las flechas que chocaban contra la muralla producían chispas, de ahí la frase “mis muros de fuego son”.

Con todos estos datos nos podemos hacer una idea del significado del mural, que hace referencia al nacimiento de Madrid y el que se cree que fue el primer emblema madrileño, anterior al siglo XII.
Según López de Hoyos, que entre muchas otras cosas, fue cronista de Madrid, el primer emblema de la ciudad sería éste, en el que se representa una gran piedra de pedernal semisumergida en agua, con dos eslabones a los lados entrelazados que frotan una piedra que hacen que de ésta salgan chispas, circuncidando el conjunto una cinta azul, en la que había una inscripción "Sic gloria labore" y el lema, el mismo que aparece en el mural del edificio de Puerta Cerrada:

"Fui sobre agua edificada, mis muros de fuego son, esta es mi insignia y blasón".

Migraciones

Por EMNM | 11/10/2011 |

Pese a los muchos ruidos que genera una ciudad como Madrid, en algunas ocasiones, sobre todo en estas fechas, no resulta raro escuchar algo poco común por encima de nuestras cabezas, algo a lo que no estamos acostumbrados, menos aún si se trata de un un grupo de vocingleras aves que vuelan a relativamente gran altura, pero que se las puede escuchar a pie de calle, se trata de las grullas, concretamente la grulla común (grus grus).

Desde octubre a principios de diciembre no es raro verlas volar por el cielo madrileño. Vienen desde el norte de Europa y una gran parte de ellas se quedan en España para pasar el invierno, sobre todo en las dehesas extremeñas.

Es muy fácil identificarlas, como se puede ver en la foto que hice ayer desde mi casa, se trata de unas aves grandísimas, vuelan en formación y su característico graznido, que es ensordecedor, las hace inconfundibles.


Hace cinco años, en un día tan castizo como hoy, festividad de La Almudena, patrona de la ciudad de Madrid, nacía Es Madrid no Madriz.

En todo este tiempo han pasado muchas cosas, tanto buenas como malas. Entre las malas la crisis, que también afecta a este blog en gran medida pero, también hay una parte positiva, la más importante ha sido los buenos ratos que he pasado, lo mucho que he aprendido y la infinidad de gente que he conocido que hoy forman parte de mi vida. Además, y dicho sea con toda modestia, también creo que Es Madrid no Madriz ha servido para mostrar una visión diferente de Madrid a todo el mundo, incluso a los propios madrileños, sin más pretensiones que pasar un buen rato y el amor a nuestra ciudad.

Cinco años de vida "bloguera" no sé a qué equivale en edad humana, no sé si es como en el caso de los perros, que dicen que cada año perruno corresponde a siete humanos, lo cierto es que son bastantes, y eso ha sido posible gracias a todos vosotros, por eso, una vez más, os quiero agradecer de todo corazón el estar ahí y os animo a seguir colaborando con vuestros comentarios, críticas y sugerencias.

5º Aniversario de Es Madrid no Madriz

Empieza un nuevo año “bloguero”, con algunas sorpresas, nuevos proyectos que espero realizar en breve y, como hace cinco años, con la misma ilusión y el mismo amor a Madrid.

¡MUCHAS GRACIAS!


La última momia guanche

Por EMNM | 11/08/2011 |

En el Museo Nacional de Antropología de Madrid, se encuentra la momia de una mujer guanche que, desde hace bastante tiempo, es objeto de trifulcas políticas y, en algunos casos, disputado trofeo de delirios nacionalistas.

La momia se encuentra en una sala que recrea un gabinete al gusto decimonónico, acompañada por el esqueleto del Gigante Extremeño o el busto del creador de este museo, el Doctor Velasco. Posiblemente no sea el sitio más idóneo para ser expuesta, pero allí está, ajena a todo tipo de polémicas durmiendo el sueño eterno.

Fue descubierta en el Barranco de Herques, en Tenerife y llegó a Madrid en el siglo XVIII como regalo al rey Carlos III. Se trata de una de las momias guanches mejor conservadas.

Hasta hace unos meses, en Madrid había otras tres momias guanches que se conservaban en el Instituto de Medicina Legal de la Universidad Complutense, éstas fueron trasladadas a Canarias donde se encuentran actualmente.

La polémica sobre el traslado o no de la última momia guanche de Madrid surge en 1976, fecha en la que se hace la primera reclamación para su devolución a las Islas Canarias. Desde entonces y, ahora más que nunca, las reclamaciones por parte del Cabildo de Tenerife y por los grupos políticos canarios, son constantes y de todo tipo. Los hay que buscando una adornada historia e identidad “nacional” ven en esta momia a su ancestro cautivo, sin tener en cuenta que los guanches prácticamente habían desaparecido tras la conquista castellana. También los hay, con mejor juicio, que piden su traslado, siempre que éste no provoque un daño irreparable a la momia.

No falta razón a los que dicen que la momia guanche de Madrid debería estar en un lugar más apropiado, primero por respeto a los restos mortales de un ser humano y, segundo, para que sirva de estudio y difusión de la misteriosa y poco conocida cultura guanche en España y en todo el mundo. Obviamente, que la momia esté en un sitio inadecuado no es lo más idóneo pero, tampoco los es la acumulación de momias en una nave industrial sin un uso claro y definido, como es el caso de las 141 las momias que se encuentran en Gran Canaria, olvidadas desde hace décadas.

A día de hoy, las reclamaciones por parte de los políticos canarios al Estado continúan, el Ministerio de Cultura tampoco cede y pone como excusa el coste y los riesgos que conlleva el traslado de la momia, sobre todo después de pasar más de 200 años en el seco clima madrileño.

No sé qué será del futuro de esta mujer guanche, lo cierto es que lo que debe de primar en todo este asunto no es politiqueo barato ni el provincianismo chovinista, es el respeto y el estudio y conocimiento de la cultura guanche.

Madrid

Por EMNM | 11/08/2011 |

Madrid from rob steckley.

Una vez más, los maniquíes son los protagonistas de un balcón madrileño, también Jaime, el autor de esta foto y de otra más que me envió hace unos días.


Como se puede observar, en este balcón hay toda una serie de maniquíes colocados de una forma extraña e inquietante, imagino que buscando un fin concreto que no logro adivinar. Yo ya no sé si la obsesión de los maniquíes en los balcones es por una cuestión estética o por afición coleccionista, lo cierto es que no hay ni un solo barrio de Madrid en el que no falten dos o tres balcones con maniquíes.

Ayer por la tarde fui invitado a una charla organizada por la editorial Planeta, con la escritora Lucía Etxebarría, junto a un nutrido grupo de blogueros, para la presentación de su última obra ”El contenido del silencio".

La cita fue en un bar cercano al museo Reina Sofía, en un ambiente distendido y acogedor.
Con relativa puntualidad, Lucía apareció vestida con un llamativo vestido rojo, he de aclarar que para mí, llegar cinco minutos tarde es eso, llegar tarde, por eso digo lo de “relativa puntualidad”, he de decir también que fue un retraso de diez minutos que estuvo justificado por una buena causa.

Una vez hechas las presentaciones de rigor, se procedió a desgranar los detalles de la novela así como las anécdotas y curiosidades, tanto de su obra como de la propia escritora, en un ambiente muy amistoso y con múltiples referencias al psicoanálisis y la psicología en general.

Este tipo de encuentros resultan bastante interesantes porque, sin dejar de ser una táctica comercial, aportan una serie de datos que son bastante enriquecedores, además, que los asistentes a la charla fuésemos blogueros, no es algo casual, precisamente esta novela, tiene mucha relación con la participación en Internet y las redes sociales. Tanto la editorial como la propia Etxeberría han querido que redes como Facebook, sirvieran de vínculo entre los lectores y la escritora. Sin alterar el contenido de la novela, los lectores han sido una parte importante en temas como la elección del título definitivo, entre otros pequeños detalles.

La novela

La historia se desarrolla en Londres y en las Islas Canarias, es una clásica novela negra que se adentra en el abandono y la pérdida del amor. Tampoco falta el suspense ni el misterio, ni las desapariciones misteriosas, ni el truculento mundo de las sectas relacionadas con el nazismo, que también están presentes.
La novela nació con la intención de ser llevada al cine y, parece ser, que tiene muy claro quienes serían los actores que podrían encarnar los personajes de su obra.
El contenido del silencio, es el fruto de dos años de investigación, recopilando numerosa información sobre sectas, con testimonios personales e informes policiales y visitando los lugares donde se desarrolla la historia.
Respecto a los personajes, la autora ha querido centrarse en las “relaciones pequeñas y privadas que se forman a pequeña escala” para darles vida propia, partiendo de sus propias experiencias personales.

Sinopsis

Gabriel, un joven ejecutivo cuya vida desahogada y apacible transcurre en Londres, lleva diez años sin saber nada de su hermana, hasta el día en que recibe una llamada que le informa de que muy probablemente ésta haya fallecido en un suicidio colectivo llevado a cabo en Tenerife. Su inmediato viaje a las islas para testificar como único pariente vivo de la desaparecida tendrá un efecto devastador y a la vez catártico, que le hará replantearse todo su pasado y su futuro en un itinerario no sólo físico, sino también, y sobre todo, interior.
Helena, la amiga íntima de Cordelia, será su guía durante la inmersión en la vida de su hermana. Una inmersión común que precipitará a ambos a confrontar sus miedos, vacíos y huidas.

Lucía Etxebarría
Editorial Planeta


Uno de los grandes problemas de Madrid es el tráfico, siempre nos quejamos por ello, por el ruido, por la contaminación y el estrés que eso produce. La Gran Vía, por poner un ejemplo, es una de las vías más concurridas de la ciudad, siempre está abarrotada de gente y de coches, muchos coches, casi las 24 horas del día.

En la foto superior vemos que el problema del tráfico no es nada nuevo, ya en esta foto tomada en 1929, podemos ver como los coches iban ganando terreno y formando parte del paisaje urbano. Tres años antes de que se tomase esta fotografía, en 1926, se instalaba el primer semáforo de España, a escasos metros de donde se tomó la foto, frente a la Iglesia de San José.

No hace mucho tiempo y por enésima vez, un grupo político y varias asociaciones, propusieron cerrar la Gran Vía al tráfico y convertirla en una calle peatonal. Algunos aplaudieron la idea, otros, como yo, nos negamos a que desaparezcan los coches que son y forman parte de esta vía de la ciudad.
Los bosques tienen el rumor de las hojas de los árboles cuando sopla el viento, el canto de los pájaros y Madrid, su Gran Vía tiene su propia banda sonora, la de los coches que, en días lluviosos como hoy, se acentúa y, en algunas ocasiones, llega a tener su propia armonía.


Foto: Ayuntamiento de Madrid

En un día como hoy, festividad de Todos los Santos, nada mejor que una historia de misterio, brujería y muerte.

A pocos kilómetros de la ciudad de Madrid se encuentra Cadalso de los Vidrios, allí tenía su residencia de verano una de las personas más influyentes y poderosas de Castilla en el siglo XV, Don Álvaro de Luna, el Condestable de Castilla.

La época que le tocó vivir fue de todo menos aburrida, España estaba dividida en varios reinos, Cristóbal Colón todavía no había descubierto América y los conflictos entre cristianos, judíos y musulmanes eran constantes, por no hablar de las intrigas, rencillas y ansias de poder entre la nobleza castellana y aragonesa. Don Álvaro de Luna supo sacar provecho de todo lo que se le ponía por delante y rápidamente su poder en Castilla se hacía más y más grande, al amparo del rey Juan II.

Cuenta la leyenda, mejor dicho, las leyendas, porque hay varias versiones, que Álvaro de Luna supo cual sería su fin.

Una de esas leyendas se desarrolla en un paraje cercano a su palacio en Cadalso de los Vidrios. Don Álvaro paseaba junto a su esposa tranquilamente cuando se toparon con un grupo de trashumantes, una de las mujeres del grupo se acercó a él y sin mediar palabra le tomó la mano y se dispuso a echarle la buenaventura, como tradicionalmente hacen las gitanas. La mujer miró con asombro y le dijo que “la raya de la muerte estaba muy marcada” seguidamente, le miró a los ojos y le dijo: “moriréis en cadalso”.

El Condestable de Castilla no llegó a creerse el augurio de aquella mujer, precisamente, su palacio de Cadalso era una de sus posesiones más queridas pero, por superstición o no, decidió que nunca más volvería a este lugar.

Unos años más tarde, la vida de Don Álvaro de Luna daría un cambio radical. La reina Isabel de Portugal, esposa del rey Juan II, del que recibió tantos favores, se puso en contra del condestable y movió todos los hilos necesarios para que Álvaro de Luna fuese liquidado.

El que fue uno de los hombres más poderosos de Castilla fue acusado en un absurdo juicio de hechicería, crímenes y de haber logrado los favores del rey por maleficios, sortilegios y prácticas oscuras. Eso le valió para que un tres de junio de 1453 fuese ejecutado en Valladolid, en un cadalso instalado en la Plaza Mayor, cumpliéndose de esta manera el vaticinio de aquella mujer trashumante.



Fuente: Pueblos con leyenda de la Comunidad de Madrid

Imágenes: Álvaro de Luna en el retablo de Sanco de Zamora de la capilla de Santiago en la Catedral de Toledo y Entierro de don Álvaro de Luna" (Cano, 1858)


En España hubo un tiempo, no muy lejano, tanto como hace unos 20 o 30 años, quizás algo menos, en el que en la víspera de la festividad de Todos los Santos, se celebraba de una manera muy diferente. No había calabazas siniestras, tampoco niños disfrazados de brujas y vampiros ni se organizaban fiestas con el exótico nombre de Halloween.

Los efectos de la globalización y la influencia de la cultura americana han transformado nuestra sociedad, en este caso, dándole un toque divertido a esta festividad tan sobria y siniestra pero, ¿cómo se celebraba antes de que esto ocurriese? Por raro que parezca, cuesta un poco recordarlo pero, por suerte, todavía se mantienen y conviven las nuevas con las viejas tradiciones.

Antes de Halloween

Sin ninguna duda, la costumbre más arraigada es la visita a los cementerios para honrar a nuestros seres queridos ya fallecidos. Por estas fechas los cementerios se llenan de gente y de flores, es un acto privado, familiar y de recogimiento.

Las supersticiones tampoco faltan en estas fechas, cada vez más diluidas y contaminadas por influencia del cine pero, todavía hoy, sobre todo en las zonas rurales, se cuentan historias espeluznantes, algunas más terroríficas que las que aparecen en el cine. La mayoría tratan de apariciones fantasmales que se dejan ver la Noche de Difuntos para traernos un mensaje del más allá o bien para tocarnos un poco las narices.

Como toda festividad, por muy siniestra que sea, también tiene su parte lúdica y gastronómica. Uno de los dulces típicos de estas fechas sobre todo en Madrid, por ser tierra castellana, son los “huesos de santo” que son unos cilindros de mazapán rellenos de yema, con aspecto de hueso, que están deliciosos y tampoco faltan los buñuelos.


Otra tradición típicamente madrileña es la representación en el teatro de la obra Don Juan Tenorio, de José Zorrilla. Parece ser que es la obra más representada en España de nuestra literatura y nunca falta en algún teatro en el Día de todos los Santos. Este año tampoco faltará la representación del Tenorio, esta vez, en un formato y escenario diferente.

Día de todos los Santos, Noche de Difuntos, Fieles Difuntos... Halloween, todo se mezcla, se adapta, se transforma pero, lo más importante es que todo se complementa.


Pensaba terminar este post con una felicitación pero ya no sé si decir felices fiestas o truco o trato, que cada cual decida.

Esta mañana 3.200 ovejas han recorrido las calles de Madrid, en la milenaria tradición de la trashumancia. Como es habitual, la marcha ovina, además de festiva, sirve para reivindicar la conservación e informar de la importancia de las cañadas reales en nuestro país.

Este año las ovejas iban separadas en tres rebaños, acompañadas de vacas, mulos y bueyes. Tampoco faltó la presencia de los pastores a caballo ni de las gentes de otras regiones de España que, vestidas con sus trajes tradicionales, nos traen a Madrid ese aire rural y festivo que ya casi hemos olvidado y que tanto nos agrada a los madrileños.

Estas son algunas fotos que he tomado esta mañana.

La marcha empezó a eso de las diez de la mañana en la calle Mayor, abriendo la comitiva los pastores con sus mastines.

Las bestias de tiro abrían el paso, este año más ligeras de carga que en anteriores ocasiones, afortunadamente.

Gentes de otras regiones de España como Cantabria o Extremadura pusieron el toque de color y musical, cantando canciones populares acompañadas de panderetas, gaitas y dulzainas.

Al final aparecieron ellas, las estrelllas del día y las más aclamadas por el público, ¡las ovejas! pese a que a juzgar por sus caras, poco o nada les importaba ser las protagonistas del día.

La famosa oveja negra también estaba allí...

Esta alfombra de lana son las ovejas que pasaban frente al viejo ayuntamiento, a la espera del pago en maravedíes que el pastor debía dar a la autoridad de la villa.

No todas las ovejas iban caminando, otras, como la de la foto, iban a caballo por ser muy pequeñitas para caminar por todo Madrid.

Después de cruzar el casco viejo, desde Mayor a Sol y desde allí a Cibeles, los pastores y sus rebaños llegaron a la plaza de la Independencia, que precisamente es una cañada real.

Finalmente, las ovejas llegaron a buen ritmo para poner punto y final a esta nueva etapa de la trashumancia hasta el año que viene, que estaremos deseosos de volver a verlas por aquí.



Gracias por venir a Madrid.

Muy Mujer

Por EMNM | 10/30/2011 |

El próximo día 3 de noviembre se estrenará el corto Muy Mujer, opera prima del polifacético Luis Escobar.
La película se estrenará en Madrid con motivo del festival de Cine Lésbico y Gay de Madrid y se espera contar con la presencia de algunos de sus protagonistas, entre ellos la actriz Amaia Salamanca, además de otras caras conocidas del cine y la cultura en general, en una presentación que promete tener más de una sorpresa, con photocall incluido.

Muy mujer es un divertido cortometraje escrito y dirigido por Luis Escobar, que ha tenido muy buenas críticas en otros festivales internacionales y, recientemente, en el MiMi LGBT Short de Barcelona.


Muy MujerJueves 3 de noviembre a las 19:40 h.
Entrada 5 €

Fundación Ateneo 1º de Mayo
Auditorio Marcelino Camacho (CC.OO)
Lope de Vega, 40

El balcón de hoy es uno de los más extraños que se pueden ver en Madrid. En este caso no hay ni maniquíes ni estatuas, sólo una serie de cubitos de playa con sus rastrillos y palas, muy veraniego.

La foto me la envió Mercedes hace unos días, pero no sé en qué calle está tomada ni el motivo de esta extraña decoración. Sospecho que se trata de alguna iniciativa pero no sabría decir de qué tipo.

¿Conoces este balcón? ¿sabes de qué se trata? ¡cuéntanoslo!

Esta tarde he estado en el Museo de Artes Decorativas para la presentación de la exposición “Grafistas, diseño gráfico español 1939 - 1975”, una muestra que pretende dar a conocer y homenajear a los pioneros del diseño gráfico en España.

La muestra reúne numerosos objetos que, por orden cronológico, muestran la evolución en el diseño del lenguaje visual en España. Se trata de una pequeña exposición que mediante carteles publicitarios, libros y revistas, nos hace un recorrido no sólo gráfico, también sentimental porque, lo queramos o no, la publicidad forma parte de nuestras vidas, un ejemplo claro lo tenemos en los eslóganes que se quedan en nuestra mente y en nuestro vocabulario, siendo recordados durante años, incluso décadas o se transforman en iconos culturales, como el toro de Osborne que empezaron siendo un reclamo publicitario y hoy son eso, un icono de nuestra cultura.

La exposición se inaugura el viernes 28 y estará abierta hasta abril de 2012. También merece la pena darse una vuelta por este museo que guarda verdaderas joyas y que no es precisamente uno de los más conocidos de la ciudad.

Más información aquí.

Un poco de todo

Por EMNM | 10/25/2011 |

Pese a la crisis, Madrid sigue siendo la ciudad que más actividad cultural tiene de España, ocurren tantas cosas que es casi imposible estar al tanto de todo lo que sucede aquí y ya no digamos participar o asistir a todos los eventos interesantes, ¡no hay tiempo! Normalmente, la mayor parte de las actividades y eventos los suelo anunciar por Facebook pero, en este caso, me gustaría reseñar aquí algunos que parecen curiosos e interesantes.

Enredados

El primero de ellos es “Enredados” que se celebra con motivo de la Semana de la Red de Centros Culturales de la Agencia Española de Cooperación Internacional al Desarrollo (AECID).

AECID cuenta con 19 centros en América Latina y Guinea Ecuatorial, de estos centros nace el proyecto “Enredados”, para ello, se han seleccionado una muestra, a mi juicio muy interesante, de la programación más representativa que se realiza en todos ellos. Durante una semana se podrá disfrutar y participar de charlas, debates, exposiciones, cine, música y arte urbano de diferentes ciudades como México, Buenos Aires, Miami o Malabo.

Todas las actividades son gratuitas y se realizarán en la Casa de América, el viejo Palacio de Linares, del 27 de octubre al 5 de noviembre.


The Room

Otra propuesta curiosa es The Room, de Miguel Ángel Vivas, una experiencia personal y, según parece, aterradora, que se puede disfrutar ahora que se acerca Halloween. Es gratis y sólo hasta el 31 de octubre en el edificio de Telefónica.



Más información aquí.


La vida no vivida

Otro evento interesante es la presentación del libro “La vida no vivida”, se trata de la primera novela de Asunción Ramírez.
Reconozco que no he leído el libro y no puedo hacer una valoración sobre el mismo pero, me llamó la atención la forma de narrar el “nacimiento” de la obra desde su blog y que coincido en algunas cosas con su autora, como la afición por entrar en una librería y comprar alguna novela de autor desconocido y dejándome llevar en su elección por pequeños detalles, creo que es una arriesgada pero interesante forma de adentrarse en un mundo desconocido, casi como si fuese una cita a ciegas.

El libro se presentará el próximo día 28 de octubre a las 22:00 horas en uno de los cafés con más solera de Madrid, el Café Comercial, en el número 7 de la Glorieta de Bilbao.

Esta es la sinopsis.

"La vida no vivida" es un relato a varias voces. Una sinfonía relatada con la emoción y la conciencia con que nos marca lo autobiográfico.
Tres mujeres en busca de respuestas. Tres épocas de la historia de España: los años cincuenta, los ochenta y los primeros del siglo XXI.
Un secreto que tensa la acción y que sobrevuela la peripecia vital de sus protagonistas, entre el fracaso, la resignación y la esperanza.

Aprovecho para desearle desde aquí mucha suerte con su libro a Asunción.



Obviamente, estas no son las únicas propuestas para estos días, hay cientos de ellas que voy anunciando junto a infinidad de noticias que puedes ver en Facebook.


Ayer estuve en el Teatro Compac de Gran Vía viendo el espectáculo "Donka, una carta a Chéjov". Se trata de la última creación de Daniele Finzi, director de otros espectáculos como Corteo, para el Circo del Sol.

La obra es un homenaje al médico, escritor y dramaturgo ruso Antón Chéjov, en que se narran pasajes de su polifacética vida y en el que se materializan sus sueños, emociones, su obra, la vida y la muerte, en un espectáculo impresionantemente hermoso. La música, la danza, la poesía, el circo, todo ello junto en un espectacular montaje que merece la pena ver.

Personalmente no creo que un teatro sea el mejor lugar para representar esta obra, se podría dar más espectacularidad en otro tipo de lugar, una carpa de circo por ejemplo pero, pese a ello, el escenario del Compac de Gran Vía cumple fantásticamente con su cometido.

La valoración personal de Es Madrid no Madrid a Donka, una carta a Chéjov es de nueve madroños.

Teatro Compac de Gran Vía

Hasta el 30 de Octubre

Hoy he podido acceder al Hotel Madrid, ocupado desde el pasado sábado por miembros que dicen pertenecer al movimiento del 15M, así fue mi visita.

Nada más llegar a la zona me encontré con la fachada del hotel tal y como se puede ver en la foto, cubierta con infinidad de pancartas reivindicativas. Por la mañana, antes de que se abriesen las puertas del hotel al público en general, hoy era un día de “puertas abiertas”, la entrada principal se encontraba abierta pero custodiada por un par de personas que parecían un poco reacios a dejar pasar a los curiosos que estábamos allí y que queríamos entrar. Una chica, que imagino que sería una de las encargadas de manejar la situación, me ha permitido finalmente entrar en el hotel, pero con la condición de acceder sólo a la primera planta, parece ser que el paso al resto de las plantas está vetado por ellos.

Nada más entrar me topé con un pequeño y decadente hall, con la mayoría de las paredes cubiertas por espejos, supongo que diseñado así para dar una sensación de amplitud a tan minúscula estancia. En algunos de los espejos había grandes carteles rotulados con consignas reivindicativas y en una de las paredes, a la izquierda, se podía ver una bandera negra con el símbolo del movimiento okupa de fabricación artesana.

Una vez dentro, he subido las escaleras hacia la primera planta y allí había bastante actividad. A la entrada también había muchos carteles, en este caso carteles orientativos en relación a los usos que se han dado a cada estancia. Me encaminé hacia una puerta que hay a mano izquierda y allí se encontraba lo que antaño fue el bar del hotel, cuya barra estaba llena de botellas, un botijo y un chaval que hacía de camarero que hablaba animosamente con un par de tipos que se encontraban allí.

Como todo parecía muy tranquilo, organizado y las pocas personas que había estaban muy afanadas en sus asuntos, me dispuse a dar una vuelta por el resto de la planta, que está compuesta por grandes estancias diáfanas en las que había más de una treintena de personas que dormían plácidamente en el suelo, cubiertos con mantas y acompañados por algún perrillo que correteaba muy alegre y ufano entre los bultos humanos. La escena recordaba un poco a un campamento de refugiados.

Al poco rato encontré a un chaval que parecía ser una especie de informador, así que me acerqué a él y le hice algunas preguntas. El chaval, que no llegaba a los treinta años, parecía dispuesto a responder así que le formulé alguna de las dudas que tenía.

Según me ha contado y como más tarde he podido comprobar, el hotel dispone de luz eléctrica, algo que hace la vida más cómoda a sus habitantes, de lo que no disponen es de agua, parece ser que sólo hay una fuente con escaso caudal.

Al chaval le he preguntado también sobre el uso que pensaban dar al edificio, según sus propias palabras, están a la espera de darle en breve un uso definitivo, dependiendo de lo que se decida en una de las asambleas populares. También le he preguntado cómo se decidió ocupar el hotel y de dónde partió la idea, a esta cuestión no me ha sabido responder, lo que sí que me ha contado es, lo que de todos es sabido, que la empresa propietaria se encuentra en suspensión de pagos y que estaban preparados con su propio gabinete jurídico por si llegase el caso de expulsión, algo que posiblemente se demoraría varios meses.

Una de las cosas que más me han preocupado en mi visita al hotel es la falta o las nulas medidas de seguridad. En caso de producirse un incendio, las vidas de todas esas personas correrían serio peligro. El hotel es un viejo edificio con estructura de madera que, de incendiarse, podría provocar una verdadera catástrofe. En relación a esto, los ocupantes parecen estar muy tranquilos porque, según dicen, se han extremado las medidas de seguridad y, además, cuentan con varios extintores.
La respuesta de los extintores no me ha parecido lo suficientemente tranquilizadora, el hotel lleva cerrado más de dos años y, como todo el mundo sabe, los extintores tienen fecha de caducidad, hay que renovarlos periódicamente, resulta obvio que con más de dos años, un extintor no sirve para nada.

Como no había mucho más que ver, he bajado por las escaleras nuevamente al hall de entrada y, de paso, he intentado hacer unas fotos con el teléfono, en ese momento, uno de los ocupantes del hotel me ha invitado a no hacer fotos, cosa que me ha molestado un poco la verdad.

Una vez abajo he visto que, además, hay una especie de sótano-pasillo que conduce al otro lado de la calle y que, sospecho, que comunica con el viejo y abandonado teatro Albéniz, digo que sospecho porque cuando me disponía a entrar, otro ocupante del edificio me ha invitado a salir de allí.

En vista de que no podía obtener más información y que todo parecía estar condicionado por la asamblea que se iba a celebrar por la tarde, además de que no me dejaban hacer fotos y que tampoco me estaba permitido explorar por mi cuenta el edificio, quien sabe si velando por mi seguridad, decidí abandonar el inmueble y continuar con mis obligaciones diarias.