Antiguamente en todos y cada uno de los vagones del metro había unos carteles en las puertas que decían "Antes de entrar, dejen salir" un aviso tan obvio como necesario.
Un buen día, los responsables del metro quitaron estos carteles de las puertas de los vagones, no sé si por ser algo obvio, por ahorrar o por estética. Lo cierto es que estos carteles cumplían su función, recordaban a los usuarios del metro que SIEMPRE hay que dejar salir para poder entrar, eso evita empujones y enfados.

He notado que cada día son más los usuarios del metro que se plantan como sotas en la puerta del vagón, olvidando aquello del "antes de entrar". Este tipo de acciones provocan imágenes similares a las estampidas de ñúes cuando realizan la migración.
Creo que no somos ñúes, ni estamos cruzando el Okavango, somos personas y estamos en Madrid.

Desde este blog hago un llamamiento a los responsables del metro para que pongan otra vez aquellos carteles tan didácticos, por el bien de todos y para evitar malos rollos en el Metro.

Si no los ponen por falta de ideas, Es Madrid no Madriz, en su cruzada contra el mal, propone este cartel tan aleccionador como didáctico. Digo aleccionador y didáctico porque en un principio el cartel tenía un aspecto amenazador.