En Madrid hay muchos establecimientos que cuentan con más de cien años de historia, locales comerciales que han sobrevivido a las guerras, las revoluciones y todavía hoy mantienen sus puertas abiertas pese a la terrible crisis que estamos padeciendo.
Foto: Madrid Histórico
Hace unos años, cuarenta de estos establecimientos centenarios fueron reconocidos por el Ayuntamiento de Madrid, por el esfuerzo, la profesionalidad y constancia de sus dueños, al llevar unos negocios que han pasado a formar parte de la historia y de las vidas de los madrileños y del resto de los españoles.
Algunos de estos comercios son la Real Farmacia de la Reina Madre, fundada en 1578, la librería Nicolás Moya fundada en 1862, el restaurante Botín fundado en 1725, el famosísimo Lhardy o la Casa Mira fundada en 1855 y en la que podemos comprar auténtico turrón de Jijona.
Todos estos comercios cuentan con una placa dorada con la que, como ya he dicho antes, fueron homenajeados por el Ayuntamiento.
Estas placas, como la que aparece en la foto, se encuentran en la acera, en el suelo, justo frente a los escaparates de estos establecimientos. El diseño de estas placas es un dibujo del inconfundible académico Antonio Mingote.
A mí personalmente el diseño de estas placas no me gusta nada, no sé si por lo poco que me gustan los dibujos de Mingote o porque soy muy clásico para estas cosas, pero hubiese quedado mucho más sobrio y elegante otro tipo de diseño, más regio.
Evidentemente para gustos están los colores, posiblemente yo sea el único madrileño al que le parezcan vulgares los dibujos de Antonio Mingote.