Con motivo de la IX Jornada Europea de la Cultura Judía, en Madrid se han celebrado actos, como en otras ciudades de Europa, para dar a conocer el gran legado cultural judío.
Por este motivo, la Comunidad Judía de Madrid celebró ayer una jornada de puertas abiertas que comenzó con una visita al pequeño pero interesante Museo Judío de Madrid. Después pudimos asistir a una conferencia sobre los judíos españoles y más concretamente sobre los judíos madrileños.
La historia de los judíos de Madrid es realmente fascinante y muy desconocida, que tiene sus raíces casi en el nacimiento del propio Madrid, pero de este tema ya hablaré en próximas entradas.
De lo que se habló en la conferencia fue de la historia contemporánea de los judíos de Madrid, del “retorno” de muchos de ellos en el siglo XIX después de ser abolida la Inquisición, de las vicisitudes que sufrieron durante la Guerra Civil con el acoso de los Republicanos y de su vuelta a la actividad en los años cuarenta, años en los que no había en España libertad de culto y en el que muchos judíos abandonaron su religión, esta vez no por la fuerza como en siglos anteriores, por propia voluntad para evitar su discriminación.
Afortunadamente, hoy la comunidad judía de Madrid goza de buena salud, es pequeña y poco conocida, en mi opinión, este desconocimiento de la cultura judía madrileña es en parte por su culpa, ya que son bastante reservados a la hora de expresar su cultura, también es cierto que la prensa europea y muy concretamente la española, ha creado una pésima imagen de ellos debido a los conflictos en Israel, una imagen que ha distorsionado injustamente hasta un grado extremo a todo el pueblo judío. Es posible que este motivo sea uno de los que justifica esta reserva a la hora de expresar su cultura y sus tradiciones.
Después de la conferencia, nos mostraron la sinagoga, se trata de un templo relativamente moderno con una decoración sobria pero muy colorida gracias a las vidrieras de colores que la circundan.
Para finalizar este día de puertas abiertas, el rabino, el Sr. Baruj Garzón nos deleitó con hermosos cantos sinagogales sefardíes cantados en hebreo y en ladino o judeoespañol.
Es una experiencia verdaderamente fascinante el poder escuchar esos viejos cantos en ladino, nuestro viejo castellano, el que hablábamos hace más de 500 años y que ha permanecido vivo de generación en generación gracias a los judíos sefarditas.
Con los cantos finalizó esta interesantísima jornada de puertas abiertas que se volverá a celebrar dentro de un año y que os recomiendo.
Aprovecho para informar que la Comunidad Judía de Madrid realiza durante todo el año numerosas actividades muy interesantes que se anuncian en su página web.