Hace unos días, desde aquí denunciaba la mala gestión del arbolado por parte del Ayuntamiento de Madrid, hoy traigo otro caso de mala gestión, bueno, mejor dicho de la inexistencia de la gestión del arbolado porque no existen.
La Plaza de Vázquez de Mella es una de las plazas más concurridas de Madrid, fue remodelada hace unos años y las obras sanearon la plaza, se añadieron nuevos elementos urbanos y se instaló una pequeña superficie arbolada. De aquellos árboles no queda ni rastro, sólo alcorques vacíos que se camuflan con el granítico pavimento y con unos espantosos maceteros de hormigón que sirven de improvisados contenedores de basura y urinario canino.
El motivo de este triste espectáculo no es otro que el vandalismo, no nos engañemos, esta plaza es uno de esos puntos negros del botellón madrileño y los fines de semana los actos vandálicos son habituales y lo más triste, ocurren ante la incomprensible pasividad de la policía.
¿Volverán los árboles? en mi opinión no, si vuelven desaparecerán víctimas del vandalismo muchas veces producido por los mismos que claman al cielo cuando se tala alguna de las muchas acacias medio podridas que jalonan las calles de Madrid.
Seamos un poco más civilizados, no es sólo un tema ecológico, es económico y el dinero sale de nuestros bolsillos.