La calle de Alcalá, además de ser una de las vías más bonitas de Madrid, es desde hace más de 800 años una cañada real.

Las cañadas reales son una red de caminos milenarios por los que el ganado, especialmente el ovino, se desplazaba dependiendo de la estación, bien al norte de España o al sur en busca de buenos pastos.
En el siglo XIII se fundó una organización llamada Honrado Concejo de la Mesta, que tenía poderes para mantener libres las cañadas de toda la península ibérica.

Actualmente en la Comunidad de Madrid hay 4.200 kilómetros de vías pecuarias , de las más de 100.000 que hay por toda España.
Una de las principales pasa justo por la Puerta de Alcalá , allí en la acera que da al parque del Retiro y en el lado opuesto, a la entrada de la calle Serrano, podemos encontrar dos mojones en los que pone Cañada Real 75,23 metros.

Esta es la medida que durante cientos de años marca el espacio que debe tener la cañada para el paso de los animales.
En 1836 las Mestas fueron suprimidas y muchos de los caminos desaparecieron.

En los años noventa se promulgó una ley que volvía a dar importancia a las cañadas reales. Muchas de ellas todavía hoy son atravesadas por ovejas y pastores, otras se convirtieron en rutas turísticas y todas son de uso común, no se puede edificar en ellas, ni alterarlas, ni cortar el paso de las mismas.
Lógicamente en el caso de la cañada real que pasa por la calle de Alcalá esta legislación no se puede aplicar ya que habría que demoler medio Madrid.

Simbólicamente, una vez al año cientos de ovejas se pasean por medio Madrid atravesando la cañada. Es una fiesta reivindicativa y festiva en la que todo el mundo disfruta de la imagen de un Madrid invadido por las ovejas.

Las ovejas no sé si disfrutan mucho porque, no sé si poseídas por el espíritu de la ciudad, atraviesan Madrid a toda velocidad, alguna que otra se come alguna de las flores que encuentran por el camino, pese a que el Ayuntamiento coloca vallas para evitar que devoren los jardines.

La comitiva ovina finaliza con el rápido y eficiente servicio de limpieza urgente, que van detrás de las ovejas, para limpiar la estela de cagarrutas que van dejando a su paso.